15 FALSOS TRATAMIENTOS PARA EL AUTISMO Y COMO DETECTAR LOS TIMADORES

El autismo es una de las condiciones que más variedad de intervenciones ha creado a lo largo de su existencia desde 1945 cuando Leo Kanner lo hizo oficial. Las familias, una vez reciben el diagnóstico se enfrentan a un camino de incertidumbre y riesgos. No son pocos los que aprovechan esa incertidumbre para llenarse los bolsillos a costa de una condición que lejos está de solucionarse con curas milagrosas. En este artículo abordaremos las diferentes estrategias que usan los timadores, también llamados vendedores de humo, y enumeraremos los tratamientos que se han inventado con el único objetivo de jugar con las ilusiones y el tiempo de las familias y las personas con autismo.

TRATAMIENTOS PARA EL AUTISMO QUE SE VENDEN EN LA ACTUALIDAD

La oferta de tratamientos para el autismo sin sustento científico es ilimitado. Un tratamiento deriva de la “mejora” de otros y así se crea un mercado que es muy difícil de controlar. Hay una gran variedad e incluso muchas familias han intentado entre cuatro a cinco tratamientos, algunas veces de manera simultanea. Veamos algunos tratamientos que están en auge.

Quelación: 

La terapia de quelación suministra productos químicos que se adhieren a los metales pesados y así facilitan su eliminación del cuerpo.

Estos productos están autorizados para uso por envenenamiento de plomo, mercurio, arsénico, cadmio, entre otros. No hay evidencia de la quelación como tratamiento para el autismo porque este no tiene como origen el envenenamientos por metales.

Por el contrario, un tratamiento como este a costado la vida de niños al eliminar por la misma vía minerales esenciales como el calcio y otros que afectan todo el organismo. Los que venden la quelación como tratamiento del autismo aseguran realizar pruebas (desde luego que solo ellos hacen en sus propios laboratorios) donde muestran los niveles “altos” de metales pesados. Al contrastarse con laboratorios legales que no identifican una muestra sensible de estos metales en pacientes autistas. Es un tratamiento costoso y en ocasiones doloroso. La evidencia la sitúan basados en otras condiciones que no tienen nada que ver con el autismo.

Terapia con Lupron: 

Lupron es un fármaco inhibidor de la testosterona utilizado en el tratamiento de la pubertad precoz y el cáncer de próstata, así como para la «castración química» de los delincuentes sexuales. Su uso para el autismo se basa en la hipótesis de que la testosterona magnifica los efectos tóxicos del mercurio (volvemos a la teoría de los metales pesados). No hay evidencia de que Lupron sea seguro o efectivo para el tratamiento del autismo. Además, puede tener efectos secundarios dañinos que incluyen urticaria, dificultad para respirar/tragar, entumecimiento, hormigueo, debilidad, dolor o dificultad para orinar, sangre en la orina, dolor de huesos, dolor testicular y osteoporosis.

Terapia de oxígeno hiperbárico (TOHB): 

se ha demostrado que la TOHB es eficaz para el tratamiento de la gangrena, el envenenamiento por monóxido de carbono, «las curvas» y varias otras afecciones relacionadas con el oxígeno en la sangre. No hay evidencia que indique que el origen del autismo se deba a una insuficiencia de oxígeno en la sangre. La evidencia tampoco respalda que la TOHB sea segura o efectiva para el tratamiento del autismo. Además, los beneficios del oxígeno hiperbárico administrado se pueden encontrar en oxigenación con máscaras que son menos costosas, si el oxígeno fuera la solución para el autismo.

Dieta sin gluten y sin caseína (GFCF): 

Los promotores de las dietas sin gluten (proteína que se encuentra en los productos de trigo, centeno y cebada) y caseína (proteína que se encuentra en los productos lácteos) sustentan su teoría en que los niños con autismo tienen «intestino permeable» que conducen a la filtración de opioides que escapan al torrente sanguíneo y luego viajar al cerebro causando comportamientos autistas. No hay evidencia para esta afirmación, y los estudios han encontrado que, en comparación con los niños con un desarrollo normal, los niños con autismo no tienen más opioides en la sangre. Además, una dieta GFCF conduce a una densidad ósea más baja que los controles, lo que produciría osteoporosis temprana. Al final se encuentra con que, a menos que sean pacientes celiacos, los beneficios no tienen nada que ver con el autismo.

Aquí te comparto un video donde hablamos de esto

Terapia con células madre:

Se seda al paciente para poder extraer del hueso células madre e inyectarlas en la columna, aunque hay otros métodos que se inoculan directamente en el torrente sanguíneo. Se busca minimizar los “síntomas” del autismo. La terapia se requiere mínimo dos veces al año. La terapia con células madre para el autismo es ilegal en los Estados Unidos, pero eso no ha impedido que algunos la ofrezcan como tratamiento para el autismo en Costa Rica, China, México, Panamá y otros países. No hay evidencia de que el tratamiento sea seguro o efectivo para el autismo debido a que la condición tiene muchas variables e incluso origen desconocido, una de las cuestiones que más se persiguen es el hecho de que las células madres utilizadas no sean de seres humanos. La FDA ha perseguido a las clínicas que hacen estos procedimientos, pero han sido muy laxos en las sanciones.

Inyecciones de secretina:

Una hormona que controla la digestión y que se prepara a partir de cerdos (ya que no se dispone de una forma humana sintética), resulta ahora ser un tratamiento para el autismo que no está comprobado y es bastante experimental. La FDA ha aprobado la secretina solo para problemas gastrointestinales como úlceras o deterioro de la función pancreática en adultos, pero no ha aprobado formalmente la hormona para el tratamiento del autismo. No hay información que demuestre la seguridad o eficacia de dosis repetidas de secretina o su uso en niños. Pero muchos la están vendiendo como cura milagrosa para el TEA.

Terapia con agentes antimicóticos: 

Basados en la teoría, desde luego no comprobada, de que el intestino de los niños autistas está plagado de bacterias y hongos, se cree que al suministrar medicamentos antimicóticos se pueden eliminar las bacterias y curar el autismo al mismo tiempo. No hay evidencia que respalde a ningún agente antifúngico como cura para el autismo. Por el contrario tratar a los niños con agentes antimicóticos es potencialmente peligroso; los posibles efectos secundarios incluyen picazón, irritación, ardor, diarrea, dolor de estómago y erupciones en la piel. Algunos tratamientos antimicóticos, incluidos Diflucan, Sporanox, Lamisil y Nizoral, se absorben en el cuerpo y pueden impedir el funcionamiento del hígado.

Suplementos vitamínicos: 

No hay evidencia científica que sugiera que los suplementos vitamínicos puedan curar el autismo. El uso de suplementos sin consultar a un profesional de la salud puede ser peligroso. Algunos suplementos (p. ej., vitamina A) pueden ser tóxicos cuando se toman en dosis altas durante períodos prolongados; incluso se ha comprobado que el organismo regula el ingreso de vitaminas artificiales y las elimina a través de la orina más costosa del mundo.

Leche cruda de camella:

Se está promocionando la leche de camella para tratar el autismo con beneficios que van desde mejorar el contacto visual y las habilidades motoras hasta disminuir la inflamación. Aunque puede ser nutritiva, no hay investigaciones científicas que respalden las afirmaciones de que la leche de camella cruda es una «cura para todo» del autismo.

Terapia con marihuana: 

La marihuana sigue siendo una droga ilícita cuyo uso en el tratamiento del TEA no está respaldado ni médica ni científicamente para los síntomas centrales del autismo. estos tratamientos por el contrario tiene secundarios que incluyen percepción alterada, dificultad de coordinación y deterioro cognitivo. A largo plazo suministrar CBD o extractos artesanales de marihuana se ha asociado con una disminución de las capacidades de aprendizaje.

Terapia con parches de nicotina:

Investigaciones han descubierto anomalías en los receptores nicotínicos de acetilcolina en el cerebro de las personas con autismo, y algunos científicos han postulado que los síntomas centrales del TEA podrían atribuirse a estas alteraciones. 

Algunos hallazgos indican específicamente una escasez de estos receptores, lo que lleva a algunos a creer que estimular o aumentar estos receptores podría eliminar los síntomas del TEA. Los defensores del uso de parches de nicotina en personas con ASD creen que la nicotina liberada en el cuerpo desde el parche activa y aumenta los receptores y, por lo tanto, reduce los síntomas de ASD. A pesar de tener una justificación que se basa en hallazgos científicos, el uso de este tratamiento no está respaldado por evidencia científica. 

Ningún ensayo clínico ha demostrado que los parches de nicotina sean seguros o efectivos en el tratamiento del TEA. Los efectos secundarios comunes informados en los estudios clínicos que evalúan la seguridad y la eficacia de los parches incluyen irritación de la piel; problemas para dormir, incluyendo insomnio y pesadillas; dolores de cabeza, indigestión y nerviosismo.

Terapia con lejía, MMS, CDS o Dióxido de cloro: 

En la terapia con lejía, a una persona con ASD se le administra una forma diluida de lejía por vía oral o a través de un enema en un intento de curar sus síntomas.

 Las dosis de lejía se administran repetidamente; los partidarios de este tratamiento han recomendado que los niños beban la mezcla de lejía hasta ocho veces al día o reciban un enema hasta tres veces por semana. 

El fundamento del tratamiento es que la lejía puede eliminar bacterias, parásitos, levaduras y metales pesados ​​y, en consecuencia, eliminar los síntomas del TEA. Este tratamiento ha sido ampliamente denunciado por los daños que puede causar así como por su total falta de base científica. Ingerir lejía puede provocar fiebre intensa, diarrea, vómitos, hemorragias internas ocasionadas por la perforación del intestino y otras complicaciones que le han costado la vida a muchos niños que han sido tratados con el controversial método.

Aquí Angela corredor nos habla mas del tema

CUIDADO! MMS es un VENENO no una CURA.

Estimulación magnética transcraneal: 

TMS es un procedimiento en el que se utilizan campos magnéticos para estimular las células nerviosas del cerebro para mejorar o reducir ciertas funciones. TMS se usa actualmente para tratar enfermedades mentales, incluidas la depresión y la esquizofrenia. Los efectos secundarios a corto plazo más comúnmente informados incluyen dolores de cabeza y molestias en el cuero cabelludo. La TMS terapéutica es relativamente nueva, por lo que se desconocen los efectos secundarios a largo plazo, si los hubiere. Actualmente se están realizando investigaciones sobre la eficacia de la TMS en el tratamiento del TEA, pero no hay evidencia que respalde su uso. Requiere sesiones continuas que son excesivamente costosas y pocos realmente practican la TMS con equipos óptimos.

Anteojos de prisma: 

Se busca alterar la percepción visual de las personas con TEA para mejorar el comportamiento y, como resultado, desafían los síntomas relacionados con la visión. Los partidarios creen que algunas personas con TEA sufren una percepción distorsionada y lo compensan con movimientos y posturas anormales, como inclinar la cabeza. Las gafas de prisma tienen como objetivo mejorar las distorsiones perceptivas y ayudar al desarrollo visual. Sus supuestos beneficios se extienden a otras áreas, incluida la localización espacial, la conciencia visual, la disminución de los comportamientos de búsqueda sensorial, la organización, la forma de andar, el contacto visual, el estado de ánimo, las expresiones faciales y las habilidades motoras finas y gruesas. Desafortunadamente estos beneficios no tienen respaldo científico; es una de las terapias más costosas y enmarca a todas la personas autistas como visuales cuando hay otros tipos de percepción.

Terapia de contención: 

Se basa en la vieja teoría de las madres nevera y ve el autismo como un trastorno del apego causado por la falta de vinculación de los padres con sus hijos. En una sesión de terapia de espera, un cuidador restringe físicamente a un niño con autismo para forzar el contacto visual y reparar el apego. Este tratamiento se ha considerado ineficaz y peligroso. No hay evidencia científica que sugiera que la terapia de espera funcione y que se hayan producido muertes a causa de su uso.

Existen muchos más tratamientos que quizá puedan sorprendernos aún más. Pero para que se puedan promover existen personas dedicadas a engañar a las familias, a aprovecharse de la angustia y la incertidumbre. Ahora veamos cómo son quienes promueven estas curas milagrosas que ponen en riesgo la vida de las personas con autismo.

CÓMO DETECTAR LOS FALSOS TRATAMIENTOS PARA EL AUTISMO

Debemos estar atentos a las señales que nos evidencian ciertos tratamientos que prometen curar una condición que NO TIENE CURA como el autismo, veamos:

1. Afirman curar, mejorar drásticamente, recuperar a las personas de su autismo.
2. Dice funcionar para todos los casos de autismo, sin importar que no hay un autismo igual a otro.
3. Prometen resultados rápidos. Apelando a la necesidad de los padres de ver pronta mejoría, dicen que en cuestión de meses, a veces semanas, revierten los síntomas del autismo.
4. Utilizan testimonios para demostrar la efectividad del tratamiento. Más adelante veremos cómo lo hacen.
5. Se usa un lenguaje que hace ver el autismo devastador y lo compensan con frases como “recuperación milagrosa” “método confiable” “efectivo 100%”
6. Practican dichos métodos en lugares no certificados, con personas sin preparación médica o terapéutica, es decir, cualquiera lo puede hacer.
7. Suelen ser muy costosos. Es un sesgo que intenta mostrar que a mayor precio, mayor efectividad.
8. Los tratamientos vienen con un kit de productos que solo se venden en sitios exclusivos y que son de obligatoria adquisición.
9. No hay un seguimiento al proceso y casi siempre el padre o madre terminan acudiendo a emergencias cuando el tratamiento se sale de sus manos y afecta la salud de su hijo.
10. No tiene certificación de salud pública para ser vendido o suministrado. Enmarcando un fraude.

CÓMO OPERAN LOS ESTAFADORES, MERCADERES DEL AUTISMO.

Quienes juegan con la vida de las personas con autismo y las esperanzas de las familias, suelen tener perfiles característicos. Es importante que los reconozcamos para evitar caer en estafas, riesgos o simplemente pérdida de tiempo y dinero con esos tratamientos.

1. Eligen un problema que esté teniendo mucho auge en el momento. El autismo ha visto un incremente de diagnósticos y allí muchos encontraron una fuente de negocio. Sin importar si tienen formación médica, incluso sin tener idea de qué es el autismo, utilizan la condición para crear un negocio y lucrarse.
2. Para embaucar a las familias dicen haber descubierto un método único, infalible que solo ellos conocen.
3. Manipulan a las familias diciéndoles que si no adquieren el tratamiento es que no desean el bienestar de sus hijos. Emplean cierto lenguaje “motivacional” que lleva a hacer sentir culpables a las familias de la condición de sus hijos y dándoles un pronóstico nefasto si no invierten en su producto.
4. El tratamiento sirve para todo, no solo para el autismo. TDAH, ansiedad, trastornos de aprendizaje. Es un tratamiento plus que funciona en muchos casos sin importar el grado de la condición o incluso si el niño ha sido diagnosticado.
5. Critican a la ciencia, a las farmacéuticas y a las terapias certificadas. Todo es malo menos el tratamiento que ellos promueven. Curiosamente hacen uso de productos farmacéuticos para contrarrestar los efectos colaterales de sus fraudulentos procedimientos.
6. Atraen siempre a través de conferencias donde recopilan los datos de sus víctimas y luego los bombardean con correos, material relacionado y más conferencias. Les hostigan para que adquieran el tratamiento en un spam sin límites.}
7. No permiten que nadie los contradiga. Tienen grupos numerosos de gente dedicada a borrar comentarios negativos a sus productos o tratamientos en redes sociales. Incluso están preparados para atacar, refutar y afredir a quienes pongan su estafa en evidencia.
8. No se responsabilizan por las consecuencias. Si un niño con autismo reacciona negativamente a uno de esos fraude-tratamiento, nadie responde. Se han encontrado casos donde los niños tratados llegan a urgencias y cuando se requiere saber qué pasó, estos timadores pasan del hostigamiento a la desaparición, nunca más se vuelve a saber de ellos.
9. Aseguran que si no funciona es culpa de los padres que no supieron suministrar el tratamiento o no invirtieron más dinero en este.
10. Evaden la regulación de los entes de control, ya sea a través de sobornos o aprovechando de la laxa legislación de cada país.

CONCLUSIÓN

Como podemos ver, el mundo de los tratamientos no comprobados para el autismo es infinito y bastante complejo. Cada día alguien se inventa un nuevo protocolo, una nueva causa del autismo o una nueva teoría. Como se dijo, nadie regula ese mercado porque es bastante evasivo y usa métodos de promoción que son muy difíciles de seguir. No queda de otra que educar a las familias para que no caigan en estas estafas que ponen no solo en riesgo su dinero sino la vida de sus hijos.

Las familias y las mismas personas con autismo deben apoyarse en la evidencia científica, evitar dejarse presionar debido a su necesidad de solucionar el problema y desconfiar, desconfiar mucho. Sabemos que el autismo es una condición que conlleva muchas dificultades, pero hay que hacer uso del sentido común y comprender que es una condición que se comprende, se interviene responsable y científicamente, pero sobre todo que no tiene cura porque no es una enfermedad ni mucho menos algo que pueda eliminarse mágicamente.

te invito a leer este articulo de Angela corredor que nos dice mas al respecto

Mercaderes de Ilusiones.

Fuentes:

NHS Reino Unido

FDA.gov

SpectrumNews

Asociación Americana de Autismo

Autism Science Foundation

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